DESYERBO PODA Y SIEMBRA

RECIEN termino de hacer las tareas menos divertidas de la horticultura, como indica el titulo. Me refiero a lo contrario de la actividad contemplativa
que prepondera en la sociedad.

El asunto es que el cuerpo pierde flexibilidad aunque camino par de millas casi a diario. El desyerbo requiere de una banqueta que luego de unos quince minutos es inutil por las molestias en la espalda. Asi que cambio
de tarea y me dedico a barrer, recoger las hojas de arboles, arbustos en el suelo que acumulo para mi composta.

Otra posibilidad es desyerbar de rodillas con la ayuda de un cojin de goma por otros quince minutos, luego de lo cual procedo a la poda de aquello que impide el desyerbo. Las malas hierbas en esta ocasion, por su baja
altura, creciendo entre plantas ornamentales, mas bien ocultas, requiere tacto para no arrancar aquellas que son bienvenidas.

Es preferible no usar guantes en situaciones como esta, lo cual le dejara los dedos con la textura de papel de lija. Por lo tanto, no invierta mas de
media hora por dia de un tiron. Luego con una piedra pomez podra
subsanar la aspereza.

Finalmente, para sembrar el segundo Frangipani, hice un hoyo de tres pies de diametro por dos de profundidad. Prefiero usar una pala
de corte, no mas larga de cuatro pies, para tener movilidad en el proceso. Una vez el arbol este listo para colocarlo en su destino final, medir el cepellon es imperativo para evitar que el arbol quede a un nivel inferior al suelo lo cual seguramente traera problemas de drenaje.

Luego, hay que dar una barrida final para dejar todo como estaba.